De acuerdo a lo establecido por la Ley Orgánica de Educación Superior (LOES), las Instituciones de Educación Superior, públicas y particulares, desarrollarán e integrarán sistemas interconectados de bibliotecas, a fin de promover el acceso igualitario a los acervos existentes.
El Modelo Genérico de Evaluación de Carreras del Consejo de Evaluación, Acreditación y Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior (CEAACES), dentro de sus indicadores considera que el plan de estudios por cátedra debe contener técnicas y herramientas de apoyo, para el desarrollo del proceso de enseñanza-aprendizaje en la carrera.
En aporte al cumplimiento de estas normativas, la Biblioteca General de la UNEMI motiva la compra de acceso a bases de datos de carácter científico, para que tanto docentes como estudiantes tengan acceso a información relevante y mejorar así sus trabajos de investigación.
“Considero que la esencia o el corazón de una universidad es la biblioteca, y sus usuarios tienen que saber explotar los recursos de información que a través de sus servicios se proporcionan”, indica Fernando Pacheco, director de la Biblioteca General.
Para ello, Pacheco informa que la dependencia que dirige se encuentra dictando una serie de talleres de manejo y uso de bibliotecas virtuales, mediante los cuales se espera capacitar a la totalidad de docentes y estudiantes, hasta fin del presente año.
Harold Vega, funcionario de biblioteca, es el encargado de dictar el taller a los estudiantes, trabajo que ha iniciado por la Facultad de Ciencias Administrativas y Comerciales (FACAC).
“La calidad en lo académico es medible y, como una parte primordial, debemos asegurar el acceso a recursos que permitan una investigación de alto nivel; por tanto, en docentes como estudiantes buscamos promover y desarrollar la capacidad de utilizar estas herramientas”, informó Vega.
Liseth Aguirre, estudiante de Ingeniería en Contaduría Pública y Auditoría, fue parte de uno de los primeros grupos en asistir a estos talleres, que por medio de ejercicios prácticos permiten familiarizar al educando con estos recursos.
“Es importante, de acuerdo a lo que nos indican nuestros maestros, tener referencias en investigaciones veraces y de calidad, y acostumbrarnos a explotar lo que la universidad nos ofrece”, expresó Liseth.
Proquest, Scopus, Ebrary, Alexander Street y UNEMI Libri, son las plataformas digitales a las que puede acceder la comunidad universitaria, desde dentro y fuera del campus.
Exio Chaparro, profesor invitado de nacionalidad venezolana, tiene a su cargo la capacitación al personal docente en el manejo de estas herramientas, a fin de que promuevan su uso en los estudiantes a través de cada una de sus cátedras.
“Siempre hemos insistido en que la biblioteca empieza a cambiar de paradigma y el servicio fundamental que hay que promover es la utilización de los recursos bibliográficos que dispone, para fines de docencia e investigación”, indica Chaparro, quien expresa además que de esta forma la biblioteca aporta al crecimiento y mejoramiento de la investigación y la producción científica.
“Para su uso eficiente, se debe conocer el recurso, qué contiene, cómo se accede y se integra al proceso de investigación”, finalizó el docente y experto en documentación.
Doce profesores de la Facultad de Educación Semipresencial y a Distancia (FESaD), participaron en una de las jornadas de capacitación para la utilización de recursos bibliográficos digitales.
Elvia Valencia, subdecana de esta Facultad, posterior a su participación en el taller indicó:
“Es importante que los docentes dominemos las bases de datos y las diferentes formas de búsqueda para poder guiar a los estudiantes en el desarrollo de sus investigaciones”, expresa la educadora, quien resalta la relevancia de enseñar a los alumnos a referenciar correctamente los contenidos que presentan.
El titular de la Biblioteca, Pacheco, destaca a su vez la importancia urgente de implantar una cultura de lectura en los educandos, para lo cual la institución trabaja en la construcción de lo que es la nueva biblioteca, basada en un concepto actual y globalizado.
“Estamos en un proceso de cambio, buscamos dejar de ser una biblioteca general para ser lo que actualmente se conoce como un Centro de Recursos para el Aprendizaje y la Investigación (CRAI); nuestra visión es la implementación de servicios en dos grandes ejes: soporte a la docencia y a la investigación”, manifestó Pacheco.