Los estudiantes de la carrera de Licenciatura en Enfermería cumplen con la elaboración de un diagnóstico situacional, como parte de su internado rotativo.
Este documento, según explica Mariana Llimaico, coordinadora de prácticas pre profesionales, es elaborado enteramente por los estudiantes y contiene información base del sitio donde el estudiante se desempeña como interno.
El documento contiene aspectos que el interno determina a base de observación y experiencia adquirida.
“La elaboración de este documento da a los estudiantes la posibilidad de ejecutar funciones de tipo administrativo, docente, investigativo y asistencial, que son los roles que el interno de enfermería está preparado para llevar a cabo” dijo Llimaico.
El diagnóstico situacional está estructurado por la ubicación geográfica de la casa de salud, el nivel de atención que se brinda en la misma, su estructura organizativa y su identidad, su talento humano, los procesos y programas que desarrolla, y en caso de ser un hospital este define los tipos de atención.
Los estudiantes que se encuentran cursando el internado rotativo han entregado hasta el momento el diagnóstico situacional a los hospitales del cantón El Triunfo, y Dr. José Cevallos Ruiz, de Yaguachi.
“El objetivo de este requisito, que se estipula en el reglamento de prácticas pre profesionales de la facultad, es determinar mejoras para la casa de salud, en las cuales el estudiante puede participar y quedarán evidenciadas en un informe final que será entregado de la misma manera a autoridades de la casa de salud como de la facultad” añadió la docente.
Charlas preventivas y educativas, desarrollo de programas y organización de casas abiertas son parte de las actividades que realizan los internos en las unidades de salud, como apoyo ante lo evidenciado en el informe.
Existirán aspectos en los que el estudiante no tenga injerencia, pero que al evidenciarse puede incentivar a una gestión por parte de las autoridades, explicó Llimaico.
“Al final del año de internado, el grupo elabora un solo informe que no solo es cualitativo sino cuantitativo, donde se define número de pacientes atendidos, de campañas o programas desarrollados, personal capacitado, etc.
“Todo debe incluir datos estadísticos que evidencien el resultado de la vinculación de nuestros estudiantes con las unidades hospitalarias”, añadió la coordinadora.
El beneficio es mutuo. Con la realización y entrega de esta documentación, las entidades de salud mantienen información actualizada del desarrollo de su actividad y a la vez los estudiantes evidencian el trabajo realizado y los conocimientos adquiridos en su año de internado rotativo.